Ayer decidí volver a ver la película «El lado bueno de las cosas» de David O. Russell.
Cuando terminé de verla encendí mi ordenador. Me estaba esperando como cada miércoles el post del blog de +Perspectiva, y esta semana hablaba del por qué no necesitas controlar tu vida.
Lo leí, y me sorprendió.
Durante la película la frase que más se hace patente y se repite es «Todo está controlado» y la respuesta que le daría a cada uno de los protagonistas sin pensármelo ni un segundo no sería otra que el post de Verónica. AMÉN.
¿Coincidencias? Pues supongo , por qué no! Yo a veces creo en ellas.
Durante estos más de dos años que he parado obligatoriamente mi ritmo de vida una de mis prioridades fue simplemente eso, buscar el lado bueno de las cosas.
Y no, no siempre es posible hacerlo.
Hay veces que por mucho que lo intentas no lo ves. Ni siquiera aunque intentas ver el malo tampoco lo consigues. Pero después por unas situaciones o por otras siempre acabas encontrando ese lado, el bueno.
La frase por excelencia de la película tiene mucha razón, por lo menos para mí ;
«Estoy convencido de ello. Tienes que hacer todo lo que puedas y esforzarte al máximo. Y si mantienes el optimismo, siempre te queda el lado bueno de las cosas”.
¿Y qué pienso yo? ¿Qué si creo que hay el lado bueno? Por supuesto! Siempre, absolutamente siempre.
Una sola palabra o acción que aparezca de repente en nuestra vida puede cambiarla completamente.
Sólo hay que esperar a que aparezca y seguir buscando el lado bueno de las cosas.
¿Quieres saber por qué?
«…porque también te mereces un final feliz.»
Y tú , ¿qué lado ves?